Por Pablo F. Gallo
El Jockey Club no asegura el pago de las retribuciones, a decir de Raúl Nelson, y esto desató de inmediato una severa controversia con roja alerta de temporal incluida
Mediante el Comunicado de Prensa que adjuntamos, la Gremial de Profesionales del Turf de Palermo y San Isidro intimó al hipódromo norteño a garantizar las recompensas de las carreras programadas, a raíz de declaraciones de Raúl Nelson, titular de la Comisión de Carreras de ese circo, en relación a que los premios de la jornada de la víspera (miércoles 10) y de las reuniones venideras "no estarían asegurados". Una situación, de ser cierta, caótica y extrema.
Lo llamativo, y siempre volvemos a lo mismo, es el punto donde la Gremial asegura que comunicará a "la Comisión de Seguimiento de la Ley del Turf y a Lotería Provincial" la grave situación. Algo insólito, porque esa misma Comisión de Seguimiento es principal responsable de hacer la vista gorda, por ejemplo, en la deplorable situación de abandono al que fue sometido el Hipódromo de La Plata, justamente con la anuencia de Lotería Provincial.
Y, sin ir más lejos, son los mismos que aplaudían los demagogos discursos de Bruno Quintanacuando el barco ya empezaba a irse a pique.
Entonces, sólo esperamos un sinceramiento, un acto de mea culpa generalizado, y que cada cual asuma sus responsabilidades. Porque la encrucijada actual viene de bastante lejos. Y si bien la eventualidad declarada por el presidente de la CC sanisidrense no debe aceptarse bajo ningún punto de vista, tampoco parece sensato tomar posturas de carmelitas descalzas. La renovación dirigencial que se reclama a viva voz desde todos los ámbitos no debería tener como principal parámetro a la edad, sino a una ilimitada honestidad.
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